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Las mujeres están más preparadas, pero obtienen peores trabajos

publico.es

VICENTE CLAVERO

La elevada presencia femenina en las universidades españolas, donde hay más alumnas que alumnos, está teniendo una desigual proyección en el mercado de trabajo. El número de trabajadoras que han cursado la enseñanza superior es claramente superior al de los hombres.

Pero muchas de ellas están subempleadas y son pocas todavía las que ocupan puestos de responsabilidad acordes con su formación.

Según datos de la Fundación Conocimiento y Desarrollo (CYD) correspondientes al curso académico 2016-17, del total del alumnado universitario, un 55% eran mujeres y un 45% hombres. Ellas no sólo eran más, sino que también demostraban un mayor aprovechamiento en sus estudios, pues el 82% aprobaban todos los créditos en los que se matriculaban, frente al 72% de sus compañeros varones.

Esa mayoría femenina se vierte claramente sobre el mercado laboral, en el que a finales de 2019 había 8.812.300 de trabajadores con estudios superiores, de los que 4.578.400 eran mujeres y 4.233.800 eran hombres.

La brecha, además, se va ensanchando año a año, como refleja la Encuesta de Población Activa (EPA), que elabora trimestralmente el Instituto Nacional de Estadística (INE).

Sin embargo, conseguir un título superior no garantiza el acceso a puestos de trabajo acordes con la formación adquirida y mucho menos en el caso de las mujeres. La última EPA refleja la existencia de 394.300 tituladas superiores en situación de subempleo, casi el doble que hombres (218.100). Dicho de otra forma: dos de cada tres personas con un trabajo que exige menor cualificación que la suya son mujeres.

El hecho de que el número de trabajadoras con educación superior sea mayor que el de trabajadores explica la preponderancia de la mujer en ocupaciones como la de técnicos y profesionales científicos e intelectuales, grupo en el que ellas son 2.135.000 y ellos sólo 1.602.700. En algunas especialidades, como las relacionadas con la enseñanza y la salud, la presencia femenina llega a duplicar a la masculina.

Sin embargo, en las categorías con más responsabilidades (directores y gerentes) ocurre exactamente lo contrario. El peso de los hombres (510.400) prácticamente duplica al de las mujeres (258.400). En cambio, entre los contables, administrativos y otros empleados de oficina, la proporción se invierte: 689.300 frente a 1.394.000, siempre según los datos ofrecidos por la EPA del cuarto trimestre de 2019.

Por lo que respecta al ámbito de trabajo, las mujeres son mayoría entre los asalariados del sector público (1.842.000 sobre un total de 1.411.300) y los hombres en el privado (7.353.300 de 13.592.800).

Por cuenta propia hay el doble de trabajadores (2.042.200) que de trabajadoras (1.069.800) y lo mismo ocurre con los empresarios sin empleados a su cargo (1.318.700 y 729.700, respectivamente).